David B. Gil.

Asaemon Hikura, maestro rastreador del clan Sugawara, es reclamado para investigar la desaparición de cinco mujeres en una aldea alejada de la capital. Los lugareños culpan de la desgracia a una criatura sobrenatural que, dicen, habita la montaña, pero Asaemon sabe bien que no existe demonio más cruel que aquel que vive entre nosotros. Acompañado de Yumiko, una joven cazadora local que le servirá de guía y confidente, el samurái se lanzará a una búsqueda desesperada.
En la misma región, Nanami, hija de un forjador de katanas, trata de ocultar su romance con el joven samurái que administra su aldea. Una relación que contraviene la ley y la voluntad de sus padres. Cuando la guerra llama a sus puertas, Nanami se ve obligada a elegir entre la lealtad hacia su familia y la persona a la que se sabe unida por el karma. Su decisión influirá de forma insospechada en el destino de las cinco jóvenes desaparecidas.

La novela está narrada mediante capítulos alternos entre la misión de Asaemon de buscar a las jóvenes desaparecidas y la complicada relación de Nanami con un samurái, enmarcada en mitad de una guerra entre clanes opuestos.
El principio se desarrolla de un modo introductorio, en el que necesitas ahondar más en cada una de las historias para ir comprendiendo a los personajes para, poco a poco, engancharte más.
La historia de amor es muy compleja, debido a la situación en la que se desarrolla y a los múltiples obstáculos del entorno de sus protagonistas.
Y a cada golpe, la verdad se hacía más evidente, más atronadora: no habría más momento que el de aquella despedida, no habría más caricias que las de esa última vez.
La desaparición de las jóvenes, que es el eje principal de la historia, está cargada de misterio, ya que se atribuye la culpa a una extraña criatura de las montañas, lo que te mantendrá en vilo, pensando si las leyendas que se cuentan sobre dicha criatura son ciertas, o el enemigo es otro y los aldeanos están confundidos.
Nadie se interna tanto en la montaña, y menos desde que la habita un demonio.
Las descripciones te hacen sumergirte en el mundo rural japonés, en sus paisajes y en sus secretos.
Se nota que la novela está muy bien documentada, llena de referencias a la cultura japonesa. Aunque va acompañada de sus correspondientes explicaciones, en algún momento se me ha hecho algo cuesta arriba el leer tantos términos extraños para mí. Debe ser por no estar familiarizada con dicha cultura.
Sin embargo, es interesante leer algo diferente y aprender cosas nuevas. Además me ha encantado como se acaban uniendo las dos partes de la novela y como cobra todo sentido al final.
Una novela muy completa y recomendable tanto para los amantes de las historias ambientadas en el mundo japonés, como para aquel que quiera leer algo diferente o sumergirse en una nueva cultura.